Bueno. Tampoco hay que quejarse. Hay gente que muere sin conocer ésta sensacion, asi que casi hay que estar agradecidos.
Asi que me voy al mercado de fuencarral, a comprarme cosas que no necesito, que es el único metodo que conozco y funciona para despejar éste tipo de ideas.
PD: ésto, de propina
[Escuchando: The Knife - Deep Cuts - Girl's Night Out (3:38)]
3 comentarios:
Vaya por dios, que precisamente ahora tengo que descubrir este vidrioclí.
Ah, y la felicidad en la calle Fuencarral no se consigue comprando quincallería, sino, bate en mano, repasando todos esos odiosos modernos que llenan sus aceras.
¡Alegr(¡adiosgafasdepasta!)ía!
me gusto y te añandire como enlace en mi blog
Nos tenemos que haber cruzado por la calle más de una vez, Iced.
Y lo bueno de lo que cuentas es que sabes que tienes la capacidad de ser feliz, así que podrás volver a serlo. Hay gente que no tiene esa capacidad, independientemente de cómo sean sus vidas.
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